Por aire, agua y tierra, la Unidad para las Víctimas se las ingenió y llegó con ayudas humanitarias a Valdivia, Zaragoza y Segovia.

Los recientes hechos de violencia registrados en algunas regiones del departamento ponen a las familias campesinas en medio de un conflicto armado que no les pertenece, y que las obliga a vivir confinadas, en medio de la angustia, el miedo y la zozobra.
Estructuras armadas como el Clan del Golfo, el ELN y las disidencias de las FARC no cesan su accionar delictivo ni su disputa por el control de los territorios.
Ante esta realidad, la Unidad para las Víctimas en Antioquia, con el apoyo de las alcaldías locales, se las arregló para llegar hasta las zonas afectadas y entregar las ayudas humanitarias requeridas por la comunidad. Debido a las condiciones geográficas y a la lejanía de algunas veredas, el traslado de ayudas tuvo que realizarse tanto por vía fluvial como terrestre y mular. Por fortuna, se logró.
Un total de 2.000 personas de nueve veredas y un corregimiento fueron las beneficiadas. La Unidad ha distribuido más de 500 toneladas de ayudas, compuestas por kits de alimentos y aseo.
Ante la magnitud de la alteración del orden público, tanto el Ejército como la Policía continúan haciendo presencia en los municipios afectados por estas estructuras armadas.
También puede leer:





3 Comentarios